miércoles, 8 de noviembre de 2017

Desesperanza

Otro día... otra noche.

1:30 a.m. Los sueños se interrumpen por la desazón, despierto y solo puedo ver un cuarto de cuatro por dos, con una pequeña ventana por la que se cuela tímidamente la luz de la luna. Entonces la mente comienza a trabajar y no permite que los ojos se cierren nuevamente. No deja que el sueño regrese.

Hace ya algunos años que sigues presente en mi mente. Ambos nos negamos a dejar terminado de manera definitiva esto que ni siquiera debió empezar. ¿Cómo empezó? ya no puedo recordarlo.

De alguna forma se convirtió en una historia de fantasías y mentiras. De amigas que no saben ser amigas en dos vías, de telenovelas de la vida real, con villanos y protagonistas víctimas de las circunstancias. Una historia de terror, de viajes astrales, de fantasmas y aparecidos de muertos, de vivos, de miedo... de mucho miedo...

Otra noche... otro día y cada vez más ansiedad. 2:50 y no he podido conciliar de nuevo el sueño. ¿Es que acaso ya de por sí la vida es una pesadilla en la que cuesta creer que es la realidad, pero lo es... lo es.

A veces pienso que sí sentías algo, pero que esas mentiras, que esa invención de amistad -si acaso por mucho una intención- es lo que te detiene a decirme que sí, que me amas, que es verdad que quieres estar conmigo.

¡PATRAÑAS!

Sólo quiero justificarte y no sentirme tan estúpida como sé que soy. Solo soy una más en tu larga lista de juguetes y esa amistad de mentiras es una de tus cómplices o en el mejor de los casos solamente tu ancla, lo que te permite justificarte... 4:20... otra vez no dormí. Ya son varios años así. ¿Cuándo será que pueda olvidarte? ¿Cuando será que me permita alejarme definitivamente de ti?

6:50... Es hora de levantarse, usar la mejor máscara que hay y salir, ser un zombie más de esta ciudad en el devenir del tráfico y las aglomeraciones del transporte público, hacer como que eres un trabajador feliz y que nada pasa... Que nunca pasaste, que ya no estás aquí..

Otro día y otra noche sin dormir... Siempre, siempre pensando en ti.