Un sobresalto hizo que abriera rápidamente los ojos... el dolor de cabeza y un mareo por despertar intempestivamente... ¿Que estoy haciendo?
De puntitas y lo más ligeramente posible abandonó su cama, el malestar en su cabeza se sentía más agudo... poco a poco más insoportable... poco a poco más doloroso...
Ese aroma a podrido, y no precisamente en el impecable aseo de aquel cuarto de hotel... era su alma, a la que le estaba permitiendo morir, y no hacia nada para evitarlo... Todo lo que había pensado, todo lo que había creído... todo lo había sacrificado por una noche...
Volteo a verlo, dormía plácidamente... tanto tiempo deseandodese mutuamente y finalmente aquel encuentro... el mejor que podía recordar... el único que debía permitir... quería despertarlo, quería avalanzarse sobre él y repetir la noche... En cambio se vistio y salio sigilosamente...
El sólo se movió un poco en la cama... el ruido de la ciudad dejó la noche atrás... volvio la realidad...
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